Rituales: Encuentro en el cráter


A continuación, tenemos la partida de Raúl García Castro que ha jugado a Rituales, un juego de su propia creación.

Podéis seguir sus creaciones en X y Bluesky.

Por último, recordamos que las bases la podéis encontrar aquí.


Introducción

Para esta partida, quería jugar al juego «Rituales» (https://www.drivethrurpg.com/es/product/503272/Rituales) para enseñar un poco cómo funciona. El juego permite realizar rituales de manera individual o descubrir comunidades a través de sus rituales. Para ello, he seleccionado una de las cuatro comunidades incluidas en el juego: la civilización extraterrestre. La idea es ir realizando rituales para conocer poco a poco a la comunidad, con lo que en esta partida empezaré con el primer ritual.

Civilización extraterrestre

En una galaxia vecina habitan los idex, una nueva y extraña forma de vida inteligente.

A modo de prólogo, el juego nos pide responder una serie de preguntas iniciales para dar contexto a la ambientación elegida. Las voy a responder utilizando las Story Cards (https://juanpablofdez.itch.io/story-cards), que siempre inspiran buenas ideas. La idea no es tener una ambientación muy detallada, sino lo justo para dar pie a incluir elementos en los rituales.

¿Quién eres?

La civilización humana se extiende por toda la galaxia, y solo los más valientes se adentran en planetas inexplorados. Bueno, los más valientes y yo. La gente se sigue preguntando cómo, tras haber estudiado la mayor parte de mi vida, he acabado siendo un artista de feria en exoplanetas recién descubiertos.

¿Cómo llegaste a esta galaxia?

Viajábamos criogenizados en una nave hábitat. Algo salió mal, pues los sistemas de la nave fallaron y la convirtieron en un gran cementerio, del que solo unos pocos logramos salir con vida. Por suerte, la nave había llegado a su destino final y unos cientos de nosotros logramos bajar a la superficie del planeta y construir una colonia, dejando en órbita el mausoleo de nuestros antiguos compañeros de viaje.

¿Cómo fue el primer contacto con los idex?

Tras unos meses en el planeta, un grupo de exploración descubrió una sustancia pegajosa de origen orgánico. Durante meses intentamos buscar su origen, pero no lo logramos. Un día, un grupo de reconocimiento encontró montones de dicha sustancia en los hangares de la colonia. Se ideó un plan para intentar encontrar a los seres que la producían y, finalmente, tuvimos éxito replicando habitáculos similares a los hangares en distintos sitios cerca de la colonia. Un día, cerca de uno de los habitáculos, descubrimos a los idex.

¿Qué tienen los idex que los hace tan diferentes?

Los idex son criaturas que flotan en el aire, con forma esférica u ovalada y de distintos tamaños. Los hay del tamaño de un brazo hasta tan grandes como un aerodeslizador. Tienen una piel suave, con un tono blanco nacarado y llena de filamentos muy largos que crecen irregularmente a lo largo de su superficie, cayendo hacia el suelo. Su comportamiento demuestra que son seres inteligentes, pero hasta ahora no hemos sido capaces de comunicarnos con ellos ni de hacerles ver que también somos una especie inteligente.

Una vez hemos respondido a las preguntas iniciales, podemos empezar con el primer ritual que se propone para esta comunidad, que es un ritual de comunicación.

Ritual de comunicación

Mientras exploras en solitario un cráter, ves a lo lejos a un grupo de idex. Hasta la fecha, los intentos de comunicación con ellos han sido infructuosos; no obstante, te animas a intentar un ritual que posibilite que os intercambiéis algún mensaje.

Para comenzar con un ritual, lo primero que tenemos que hacer es definir su trasfondo; es decir, la necesidad y el objetivo del ritual. Para este ritual, el manual propone como necesidad la de “Comunicarse con los idex” y como objetivo el de “Intercambiar mensajes con los idex”.

A continuación, definimos los factores del ritual: quién participa en el ritual, en qué entorno espacial y temporal tiene lugar, y cuál es el foco del ritual. De nuevo, el manual nos sugiere los siguientes factores: como participante “”, el entorno “Un cráter” y el foco “Un grupo de idex”.

Para cada una de las comunidades incluidas en el manual se proponen seis rituales, con su trasfondo y factores. Claramente, tanto el trasfondo como los factores los podemos cambiar a nuestro gusto y hacer más o menos rituales de los sugeridos.

Ahora vamos a seleccionar el nivel de dificultad del ritual, que puede ser trivial, fácil, normal, difícil o épico. Podemos elegir el nivel de dificultad que queramos, pero como hasta ahora nadie ha logrado comunicarse con los idex, el ritual tiene sentido que sea de dificultad difícil. La dificultad del ritual nos define el dado de dificultad que hay que utilizar (un D10), un umbral de éxito de 10 y un umbral de fracaso de 6.

A continuación, a partir de todo esto, narramos el preludio al ritual, en base a la ambientación, su trasfondo, sus factores y el nivel de dificultad.

Mi último espectáculo acrobático acabó mal; me caí desde una altura suficiente como para no poder levantarme en unas horas. Mi público ni se dignó en ayudarme a levantarme. Ya me ven como un parásito en la colonia, pensando que mis actuaciones no contribuyen a la misma, y no es la primera vez que escucho decir que ojalá hubiera sido algún otro en la nave hábitat quien hubiera sobrevivido en vez de yo. Necesito un nuevo truco o espectáculo, y lo necesito ya. He salido de paseo por uno de los cráteres cercanos a la colonia buscando soledad e inspiración, y a lo lejos he visto el brillo de un grupo de idex. Si pudiera comunicarme con ellos, mi reputación mejoraría. Y, como nos pasa a todos en la colonia, son unos seres que me llenan de curiosidad.

Una vez narrado el preludio, iremos ejecutando los pasos del ritual, uno a uno, viendo si hemos sido capaces de ejecutarlos correcta o incorrectamente con el objetivo de que el ritual tenga éxito (o fracase).

Primer paso

Ahora vamos a identificar los tres aspectos a tener en cuenta en el primer paso del ritual. Los aspectos los seleccionamos tirando en la tabla de aspectos y obtenemos estos tres: Actuar, Concentración y Escribir. A partir de estos tres factores, narramos cómo se realiza el primer paso del ritual. En esta narración nos interesa que los factores del ritual y las distintas características del ritual se reflejen en la narración y sean relevantes para la misma.

Me acerco a los idex, los cuales me ignoran completamente, como siempre ha ocurrido en todas las interacciones con ellos. Los sigo a lo largo del cráter, intentando imitar el vaivén que realizan mientras flotan, y me doy cuenta de que algunos de los filamentos que cuelgan de los idex, de vez en cuando, tocan el suelo. Es decir, parece que voluntariamente bajan de altura para rozar el suelo con los filamentos. Me uno a su grupo y ando agachado, intentando rozar el suelo al igual que lo hacen ellos al moverse. Es muy complicado, pues ellos tocan brevemente el suelo con los filamentos, pero tengo algo de práctica en contorsionismo y me pongo a ello. Me requiere mucho esfuerzo y concentración seguir su ritmo y, a la vez, ir rozando el suelo del cráter, tratando de imitarlos. 

Creo que la narración refleja de manera significativa tanto al participante (yo mismo) como al cráter, al grupo de idex y los tres aspectos del paso, con lo que podré restar cuatro a la tirada para calcular el valor de entropía.

Tiro el dado de dificultad (un D10) y saco un dos. A este valor le restamos cuatro, pero como el valor de entropía no puede ser nunca menor que cero, se queda en cero. En cualquier caso, como el valor de entropía del paso es igual o menor a uno, la ejecución del paso ha sido correcta.

Tras la ejecución correcta de un paso, se lanzan tantos dados de dificultad como pasos correctos se hayan realizado hasta el momento. Si la suma de las tiradas de dichos dados supera el umbral de éxito, el ritual tendría éxito. Al tener que lanzar un D10 y tener un umbral de éxito de 10, nunca vamos a poder realizar el ritual con éxito en el primer paso. Así que vamos a por el segundo paso.

Segundo paso

De nuevo, identificamos los tres aspectos del ritual a tener en cuenta tirando en la tabla de aspectos. En este caso, obtenemos: Documento, Ingerir y Gusto. Los dos últimos tienen su relación, a ver cómo los encajo con el primero. Paso a narrar el segundo paso del ritual.

Siguiendo a los idex, me planteo que no tengo ni idea de cómo se alimentan estos seres. A lo mejor, si me ven alimentarme, logro hacerles ver que quiero comunicarme con ellos. Aunque, ahora que lo pienso, tampoco tengo claro si pueden verme. Otra opción es intentar averiguar cómo se alimentan. Me pongo detrás del idex más grande del grupo y le voy siguiendo, a su ritmo. Veo que va rozando el suelo con sus filamentos en distintos lugares. Es posible que, de alguna forma, esto sea su forma de alimentarse. Allá donde toca cada filamento, paso el dedo humedecido y luego lo introduzco en mi boca, intentando identificar si se repiten los sabores o varían. Saco una hoja de papel y voy escribiendo los sabores que identifico. En este planeta no crece nada que pueda alimentar a los humanos; tampoco hay nada que pueda envenenarnos. Y, en el rato que estoy siguiendo al idex, solo noto distintas tonalidades terrosas, minerales y metálicas.

Esta vez, creo que tanto el participante (yo mismo), el cráter y el grupo de idex se reflejan de manera significativa en la narración, así como los tres aspectos del paso, con lo que puedo restar cinco a la tirada.

Lanzo el dado de dificultad y saco un nueve, al que restándole cinco da cuatro. Un número mucho mayor a uno, con lo que la ejecución del paso ha sido incorrecta.

Cuando la ejecución del paso es incorrecta, antes de comprobar si el ritual ha fracasado o no, tenemos que ver a qué se ha debido esta ejecución incorrecta. Para ello, identificamos qué cambio se ha producido en los factores del ritual, consultando en una tabla y tirando dados. La tirada nos dice que El foco se resiste, es decir, que el grupo de idex se resiste a este paso del ritual. Una vez identificado esto, narramos cómo este cambio ha causado que la ejecución del paso sea incorrecta.

Mientras sigo al idex y paso el dedo por el rastro de sus filamentos, noto cómo se eleva del suelo, dejando de tocarlo. Al rato, vuelve a acercarse al suelo, pero cuando intento seguir su rastro nuevamente, se eleva por los aires otra vez. No sé qué está pasando, pero parece que no será fácil seguir por este camino. Tendré que pensar en otra cosa.

Ahora vamos a comprobar si el ritual ha fracasado. Para ello, lanzamos tantos dados de dificultad como pasos incorrectos tengamos hasta el momento, que en este caso solo ha habido uno. Como estamos realizando un ritual de dificultad difícil, el umbral de fracaso es de seis, y tenemos que tirar el dado de dificultad, que es un d10. Si el resultado de la tirada es mayor que el umbral de fracaso, el ritual fracasará. Lanzo el dado y saco un seis justo. ¡El ritual no ha fracasado por los pelos! La idea de ir probando a qué sabe el suelo tampoco parecía que iba a llegar a buen puerto, mirándolo en retrospectiva. Vamos a por el tercer paso; a ver si hay suerte, porque no sé si me puedo permitir ejecutar incorrectamente otro paso…

Tercer paso

Seguimos intentándolo con un tercer paso del ritual. Para ello, identificamos otros tres aspectos del ritual. En este caso, tirando en la tabla de aspectos obtenemos: Recitar, Instrumento y Gusto. Los dos primeros aspectos me cuadran bastante, pero no sé cómo voy a integrar el tercero en la narración del paso, además de que justo me salió en el paso anterior.

Continúo andando con los idex. Se me ocurre que, ya que sus cuerpos son membranosos, tal vez sean capaces de identificar de alguna manera las ondas sonoras. Pero no tienen nada que se parezca a una oreja. ¿Podré transmitirles que soy un ser inteligente a través de sonidos? Cojo dos piedras del cráter y me dispongo a recitarles la serie de Fibonacci a ver si son capaces de identificarla. Cosas así funcionaban en los libros que leía de joven, ¿por qué no me van a funcionar a mí? Cada número lo hago repitiendo un sonido grave y proyectando mi voz, tal y como hago en los espectáculos, tantas veces como unidades tenga el número, y entre números choco fuertemente las rocas entre sí. Y así empiezo: 1, 1, 2, 3, 5… o mejor dicho: ummmm, clac, ummmm, clac, ummmm ummmm, clac…

Esta vez, la narración sigue reflejándome de manera significativa; también al entorno, el cráter, ya que he usado las piedras del mismo. Pero el foco, que es el grupo de idex, no participa en este paso del ritual, y no he logrado integrar el aspecto del gusto en el paso, con lo cual solo resto dos a la tirada. Lanzo el dado y saco un tres. He tenido más suerte de la que pensaba, pues se queda un nivel de entropía de uno, con lo cual la ejecución del paso ha sido correcta de nuevo. ¡Por los pelos!

Esta vez sí que podría tener éxito en el ritual. Lanzo dos dados de dificultad (dos D10), ya que he ejecutado dos pasos correctamente hasta ahora. Saco un siete y un siete. Como la suma, catorce, es mayor al umbral de éxito de diez, ¡el ritual ha tenido éxito! Es algo que no me esperaba. He tenido muy buena suerte en los dados y otro paso incorrecto seguramente habría mandado todo al garete.

Consecuencias

Una vez el ritual ha tenido éxito, vamos a ver sus consecuencias. Algo similar haríamos si el ritual hubiera fracasado. Primero restamos el número de pasos correctos al número de pasos incorrectos, es decir, restamos dos menos uno, que es igual a uno, y consultamos en la tabla de éxito las consecuencias del ritual. En este caso, con una puntuación de uno, tenemos Una ejecución habilidosa del ritual. Se cumple el objetivo mejor de lo esperado, satisfaciendo la necesidad con creces.

Con esto, narramos las consecuencias de haber cumplido el objetivo del ritual y cómo ha afectado el ritual a la necesidad. Nuestro objetivo era intercambiar mensajes con los idex y nuestra necesidad era comunicarnos con ellos. Así que narramos las consecuencias.

No paso del trece en la sucesión de Fibonacci, pero voy repitiendo la sucesión una y otra vez hasta llegar a esa cifra. Pierdo la noción del tiempo entre el bamboleo de los idex y el mantra de Fibonacci. De repente, veo cómo tres de los idex se elevan flotando mientras los demás se quedan quietos. Los idex alcanzan una altura considerable hasta que las corrientes de aire los empujan a la lejanía. Bajo la mirada y me quedo sin saber qué hacer, nunca había visto a los idex tan estáticos. De repente, me doy cuenta de que se han colocado en grupos: un idex, otro idex, más allá otros dos, otros tres y otros cinco. Es más, se han agrupado formando una espiral. Como el siguiente número era el ocho y no podían formarlo, los otros tres se han ido. Me quedo de piedra y sigo repitiendo la sucesión, aunque no logro mayor reacción por parte de los idex. Da igual, no solo he aprendido un par de cosas interesantes sobre los idex, sino que he logrado mandarles un mensaje y atraer su atención. En la colonia no se lo van a creer, y mientras vuelvo recorriendo las paredes del cráter, no paro de fantasear con un nuevo espectáculo en el que participen los idex.

¿Y ahora qué?

Y así finaliza el primer ritual en el que interactuamos con los idex. Me ha salido un personaje con cierta gracia; ese toque de paria puede funcionar bien y el drama de la nave hábitat puede dar juego. Los idex han desvelado algo, pero siguen siendo un misterio. ¡Sabemos tan poco de ellos!

El manual propone para esta comunidad otros cinco rituales para seguir conociendo a los idex; aunque, si alguno no nos gusta, podemos inventarnos otros o modificarlos a nuestro gusto.


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