Presentamos esta partida de Galthor, que ha jugado a Notorius de Jason Price.
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Recordamos que las bases la podéis encontrar aquí.
Introducción
Notorious es un juego de Jason Price ilustrado impecablemente por Torben donde, basándose en el juego de Ronin, encarnaremos a un cazarecompensas, aquí llamados nómadas, en lo que parece ser una galaxia muy muy lejana…
Como es la primera vez que expongo lo que viene siendo mi juego en solitario explicaré que con Notorious hago algo muy concreto que es jugarlo desde Notion (pondré alguna captura) y uso una app generadora de dados (Dice).
Al margen de eso, y para mantener la simpleza al máximo al jugar en viajes, no uso ninguna clase de oráculos ni sistemas más allá de lo que ofrece el juego.
El juego es sencillo, funciona con un bucle de “exploración” y “encuentro” hasta que se consiguen dos pistas a medida que aumenta la Notoriedad del personaje. La tercera pista es siempre el encuentro final con el objetivo.
Nota: El juego está completamente en inglés así que los términos traducidos no son oficiales. La partida está contada en primera persona a veces en presente y a veces en pasado para emular que es el personaje quien escribe un diario.
Partida
La captura de Quentin Lian, diario del Nómada Mako Lillei
Exploración1
He aterrizado en uno de los espacio-puertos de Iyama. No estoy acostumbrado a ciudades tan grandes y este sitio es básicamente un planeta urbano, apenas tiene zonas naturales. No va a ser un encargo muy agradable…
Comencé a caminar por una de las grandes avenidas que salían desde el espacio puerto, tras asegurarme de que mi nave estaba a buen recaudo. Era un lugar atestado de gente, con multitud de vehículos voladores que viajaban por encima de mi cabeza. Pero algo mucho más discreto llamó mi atención.
En un pequeño callejón había una estatua que parecía antigua, más que la propia ciudad. Representaba a un guerrero de la Orden Mística, pero sus ropajes eran muy antiguos así como sus armas. Cuando lo miré con detenimiento pude ver a este guerrero, un ghol de cuernos retorcidos, luchar contra miembros del ejército traidor, predecesores del Viejo Imperio. Curiosamente para los que ahora trabajo, supongo que nunca puedes fiarte de nadie (+1 Motivación).
Destino1
No quise pensar mucho en aquella estatua y continué hasta llegar a las Torres donde se asentaba el sindicato de la Luna Roja para buscar a alguien que pudiera saber dónde se encontraba mi objetivo. No era una apuesta muy segura, pero el sindicato solía saber cosas y por algún sitio había que empezar.
No tardó mucho en aparecer el primer capullo. Habría más, seguramente. Conozco la técnica: se choca contigo, te acusa de alguna gilipollez como intentar robarle y así si la toma contigo parece que la culpa es tuya. No le salió bien, no es el primero y además no es profesional… lo que me dice que no es parte del sindicato. ¿El objetivo sabe que voy a por él? Mierda, eso hace las cosas un poco más difíciles. Solo un poco.
El tipo, un humano delgado y calvo, con una de esas perillas ridículas que se dejan los peludos sería novato pero sabía luchar. Lo había subestimado y por poco no me atraviesa el pecho con su cuchillo, pero yo tampoco soy nuevo y no tardé en desarmarlo cortándole algunos dedos en el proceso. Deje que se marchara, se lo pensaría antes de volver a aceptar un encargo así (+1 Favor).
Exploración 2
Por suerte eso no atrajo la atención no deseada del sindicato ni de la seguridad. En Las Torres cada cual se metía en sus cosas… pero tener problemas con la Luna Roja, significaba tener que salir del planeta echando leches si querías seguir con vida. (+1 Motivación)
Destino 2
Seguí buscando por el lugar, quizás tentando mi suerte. Pero necesitaba alguna pista de donde podía encontrarse el tal Quentin. Los humanos son más escurridizos de lo que parecen, jeje.
No lo encontré, pero encontré un insectoide vigilándome. Al cabo de un rato me harte y me enfrenté a él. Me dio una excusa vaga, diciendo que miraba a todos los recién llegados con intención de buscar una buena venta… pero claramente o es un ojeador que vigila a los nómadas o era un ratero buscando su oportunidad. Le dije que si le volvía a ver cerca le cortaría las patas (+1 Notoriedad)
Exploración 3
Quizás fuera por culpa de ese insectoide o quizás me había confiado demasiado. En cualquier caso maldije antes de seguir el rastro que habían dejado los que me habían robado mientras dormía. Por suerte no me robaron las armas y no he tardado en encontrarlos. Se han alejado de las Torres, seguramente pensando en vender mis cosas en esta especie de mercadillo que han montado. Por desgracia para ellos no cuentan con protección alguna pero yo cuento con mi rifle.
El primero fue el que más suerte tuvo, murió antes de enterarse de que pasaba. Los otros dispararon contra mí y no pude evitar sonreír.
El segundo muere, pero uno de ellos ha logrado darme en un hombro. Suerte de armadura… No ha sido fácil pero he recuperado mis cosas (-1 de motivación+1 de notoriedad)
Destino 3
Cansado de no encontrar nada más que problemas he ido al palacio del Viejo Imperio. He entrado en su armería, donde el maestro artesano enseñaba a un grupo de novicios. La armería estaba a rebosar de armas para el imperio y algunos proyectos a medio terminar. Comencé a hablar con uno de ellos, un joven cherrin de pelo pardusco, que me aseguro que podía fabricarme una armadura mejor que la que tenía. No tardó mucho en hacerla y, al menos, parecía más robusta que la mía pero no le restaba flexibilidad. Se lo agradecí, en mi línea de trabajo cualquier protección extra es bienvenida (+1 defensa contra pista u objetivo, 1 uso).
Exploración 4
Tras aquello tuve un rato de calma que me sirvió para adaptarme a llevar la nueva armadura. El palacio no tenía tanta gente como pensaba, pero se veían tropas haciendo patrullas lo que significaba que había más movimiento del que parecía en superficie. (+1 de motivación)
Destino4
Tuve que pasar un control. Uno de los problemas de trabajar como independiente es que la comunicación es escasa y a menudo ni los que te han contratado son conscientes de ello, maldita burocracia (+1notoriedad).
Pero el control no era para evitar que entrara la población sino para evitar que un monstruo saliera. No sé qué clase de mutante era pero tenía el tamaño de un rancor. Decidí ocuparme de él, suelen pagar por estas cosas. Fue un combate difícil, logre llamar su atención disparando a una célula de energía reventándola, pero cargó contra mí y estuvo a punto de partirme en dos con su tentáculo. Logré matarlo cuando estaba a punto de arrancarme un brazo de un mordisco, sobreviví por las escamas (-3 motivación +1 Notoriedad).
Pero no había acabado, un par de Lek’tok, los insectoides, corrieron hacia mí para pedirme ayuda. Por algún motivo, y no pregunté, querían salir del planeta y al verme acabar con aquel monstruo supusieron que yo era su mejor baza. Les llevé hasta mi nave, y traté de reclutarlos. Resultaron ser un par de doctores que habían hecho algún experimento con aquella criatura. Había salido muy mal y ahora querían huir antes de que les cogieran. Hice un trato con ellos, les escondería en mi nave pero a cambio me echarían una mano con las heridas, nunca estaba de más tener un doctor de confianza. (-1 favor, +1 asset medico)
Exploración 5
Regresé de nuevo a las calles. No me había ido mal, pero seguía sin tener rastro alguno de aquel humano.
Mientras caminaba observé la reconstrucción de uno de los grandes edificios de la avenida. Había sido destruido durante la guerra y ahora se veía claramente la diferencia entre la antigua estructura y el nuevo diseño imperial. Hasta en este planeta tan “civilizado” se notaban las huellas de la guerra (+1 motivación)
Destino 5
Me encontré caminando por una estación de tren dominada por los rebeldes de El Nuevo Levantamiento. Por más que quisieran ocultarlo las señales estaban ahí. Si los imperiales los descubrían sería su fin. Pero no tenía intención de delatarlos, no era cosa mía, sin embargo, quizás supieran algo de mi presa. Quizás le habrían tratado de comprar los planos que robó…
Pese a ser un nómada, somos neutrales, no les gustaba. No tardé en encontrarme con problemas. Un tipo trató de armar un escándalo para llamar la atención sobre mí y que me echaran de allí. Lo reduje rápidamente y sin mucho esfuerzo, antes de que me causara problemas o entorpeciera mi búsqueda. (+1 favor)
Exploración 6
La oportunidad se produjo poco después cuando me encontré al que parecía ser el líder de un sindicato de estibadores de naves discutiendo con unos agentes. Cuando parecía que las cosas iban a empeorar intervine, deshaciéndome de los dos agentes del imperio.
El viejo me entrego como agradecimiento una digi-pulsera (+2 de motivación vs pista o objetivo). No era una pista, pero al menos había conseguido algo.
Destino 6
Allí, entre los estibadores busqué un sitio donde poder descansar. Estaba tomando algo cuando me topé con un veterano, un twi’lek al que habían cortado medio lekku en alguna batalla. Estaba bebiendo como para emborrachar a un banta, pero parecía bastante sereno. Tras unas copas me contó que había luchado del lado del imperio en la guerra y que a cambio su aldea había quedado destruida y reconvertida en una fábrica de miritho. Cuando pudo retirarse no volvió a empuñar un arma. No me extraña, cuando ya no tienes nada por qué luchar… (+1 motivacion).
Exploración 7 Pista 1
¡No podía creerme mi suerte! Me encontré con un “viejo amigo” justo cuando parecía que iba a marcharse en una nave. Un viejo amigo anfibio que me traiciono hace unos años, precisamente, por juntarse con un grupo como el que protegía a mi presa. Había cambiado, estaba más delgado y sus escamas más oscuras y duras. El tiempo no había pasado en vano para él. Pero yo seguía recordando lo que me había hecho. El gas venenoso que uso en aquella emboscada fue lo que causó daños al sistema nervioso y por lo que necesito inyectarme ese cocktail de drogas para no sentir dolor.
Me acerqué a él y lo empujé hasta un pequeño cuarto, lo suficientemente estrecho como para que no pudiese esquivar mi cuchillo, que ahora le apuntaba al estómago. Hablé con él como si fuéramos viejos amigos. Y mi corazonada era correcta.
-Lo hace por venganza. A él también le traicionaron los suyos. Ese imperio… nos traicionó a todos, pero tú no te das cuenta porque eres un perro de presa- me dijo.
Quentin Lian era un soldado de asalto, su capitán los metió en la boca del lobo y los cherrin mataron a todos. Las culpas no las llevó el capitán si no que encarcelaron a Lian por haber “desobedecido órdenes” como si fuera el culpable. Estaba pensando en lo similares que eran las historias de todos los veteranos imperiales y eso debió distraerme porque Glot’tydy sacó un vibrofilo y trató de apuñalarme por sorpresa. Por suerte tenía mi armadura mejorada que me libró por las escamas de ser yo quien acabase con las tripas por el suelo… mi viejo amigo no tuvo esa suerte. (+1 Notoriedad +1 Pista)
Exploración 8 Pista 2
Ahora sabía algo más sobre mi presa. Sabía dónde podría encontrarse. Si alguien sabía dónde podía estar era Akulo Yuron, un muriano que trabajaba en el desguace de naves, pero que había tenido contactos anteriormente con ex-soldados.
Era un tipo arrogante, demasiado para su propio bien. Pero también era peligroso, su reputación de implacable lo precedía así que traté de hablar con él y descubrir por qué ayudaba al objetivo.
Resulta que ahora Akulo trabajaba con La Luna Roja y Quentin había acordado con ellos darles información la información que había robado del imperio a cambio de protección.
-Solo por hablar contigo podrían matarme…-me dijo el rátido antes de sacar un cuchillo y tratar de apuñalarme. Empezaba a ser una costumbre y no me gustaba nada.
Fue rápido, como siempre suele ser. Lo desarmé cuando trató de apuñalarme y lo amenacé con su propio cuchillo. No lo maté, no me hacía falta. Ya sabía todo lo que necesitaba saber. Solo tenía que tender la trampa.
Exploración 9 Objetivo
Hice que Akulo le hiciera creer que iba a ser trasladado. No tardó más de una hora. El problema: lo escoltaban varios matones de La Luna Roja.
No hizo falta hablar. Antes de que llegaran hice el primer disparo contra el piloto. La nave se estrelló contra una pila de chatarra y yo seguí disparando. Los guardias salieron del coche y devolvieron el fuego pero yo tenía una mejor posición. Cuando maté a los tres guardaespaldas me acerqué y saqué al humano del coche y le até las manos. No era un luchador y no se resistió.
Conseguí atrapar a Quentin Lian y llevarlo de una pieza, con heridas leves, al mando imperial. Por desgracia La Luna Roja no estaba contenta con que hubiera actuado contra ellos. Se de buena tinta que han mandado a otro nómada a por mí, un droide psicópata que puede ser un problema en el futuro. Quizás lo mejor sea abandonar el sistema e irme al borde exterior hasta que se olviden de mí.
FIN
Hasta aquí llega lo que resume una partida de Notorious. Pero con la salida de la expansión Outsiders, se incluye un modo “trilogía” en el que permite continuar con el mismo personaje durante tres partidas mezclando las tablas de ambos libros así que no descarto continuar con este personaje un poco más en algún planeta del borde exterior.